miércoles, 29 de diciembre de 2010

Vivir es...

Estar en un lugar que es tuyo, donde nadie critique lo que hagas o dejes de hacer. Donde te sientas cómodo estando descalzo, sin inhibiciones ni tapujos. Donde la compañía más grata seas tu mismo. Donde aprendas poco a poco, a tu ritmo, acorde a lo que eres y puedes, sin que nada ni nadie te presente o represente obstáculo, donde no existan las comparaciones y el tiempo pase cual reloj de arena, donde los minutos sean de paz, y los segundos de felicidad. 
Que tus desayunos sean batidos de sueños que vayas digiriendo paso a paso. Tus almuerzos de gloria y tus cenas de triunfos. Al dormir tu cama te haga flotar y al despertar estés rodeado de un jardín en el que tu mismo vayas cultivando cada una de las rosas que hacen parte de tu vida, siendo tu, sin máscaras ni antifaces. Donde te quieras tu, luego tu, y después corresponderle a aquel que decida entrar a formar parte de ese pequeño mundo de virtudes y defectos. Donde nadie es menos que nadie y donde todos valemos mucho.